Al otro lado

Me intercepta un informático cuando voy a dejar mi cargador del móvil a una compañera…
“Ya que estas aquí…” me dice
Le escucho.
No se de que me habla, a mi nadie me cuenta nada.
Le miro pensando “si, si, que la maquinita lo va hacer por mi”, sin creérmelo.
Le cuento lo que yo hago.
No, no han previsto eso, ni eso otro tampoco.
Que raro…

Vuelvo a mi sitio con un montón de trabajo aburrido que solo una persona puede hacer, busca código, verifica código, cambia código…
No me lo puedo creer…

Llega mi jefe, le comento “el informático me ha dicho esto, nadie me ha contado nada”…
Me mira…, las cosas desde aquí no se ven igual.
Me temo que ningún cacharro va a hacer nada por mi.
Me suelta “ojala fuera verdad y pudieras dedicarte a otras cosas más interesantes”.
Si, ojala todo lo que ven los informáticos fuera posible, pero en su mentes cuadriculadas no entran las “tierras de nadie”.
Y mientras ellos arreglan el mundo yo me aburro buscando códigos y me pregunto en que siglo trabajo…

Mañana las mando a ellas…